jueves, 28 de marzo de 2013

Fanboyismo o "señora, daría dinero por acostarme con su hijo"

LOL 
Amar. Una cosa muy fuerte y muy bonita. En catequesis te dicen que está bien...pero también te lo dicen de tocar a nenes de mejillas sonrojadas. Con lo cual, si te pasas por el forro lo segundo y te va bien, es razonable pensar que lo primero no puede ser tan bueno. Como decía HeadUp, todos tenemos filias y fobias, y tras su artículo en que nos contaba cuales eran sus fobias particulares, llega éste en el que os contaré cuáles son aquellos jugadores a los que amo por encima de todas las cosas. Y lo haré dejando a u lado a jugadores estelares, para salirnos del Paul-LeBron-Howard-Kobe-Durant blabla de costumbre.

En primer lugar, me gustaría comenzar con un término que se da en llamar Pilf, o Player I'd Like to Fuck, y que viene a resumir lo que un fanboy que se precie siente hacia sus jugadores predilectos. El fanboyismo puro va, en ocasiones, más allá que el hate, sobretodo cuando nuestros pilfs favoritos comparten con nosotros sentimientos tan bonitos y poderosos como el españolismo, la religión o el amor por las drogas.
El fanboy, en la línea del hater, nunca reconocerá lo tróspido de su amado. Siempre habrá alguna excusa para su mal hacer y siempre habrá cosas positivas que sacar de su juego. Para ilustrarlo, un ejemplo: qué importa que Pau "Ganso" Gasol se arrastre por la pista, si podemos echarle la culpa de su nivel a las lesiones, a un entrenador que no le respeta y a jugadores que le marginan? Pues no importa nada. Podemos echar mano de la sección de nba de ese oasis de conocimiento y debate intelectual que es la sección NBA del Marca y encontrar múltiples ejemplos.

Volviendo al tema del fanboyismo y dejando a un lado mi vena hater, me gustaría comentar un último fenómeno antes de ir de lleno con mi lista de pilfs. Y es el denominado haterismo colateral. Este término explica el increíble odio que es capaz de sentir un fanboy hacia ciertos jugadores, entrenadores, etc. cuando ve que estos amenazan la tremenda carrera de sus pequeños. De esto sabe mucho McMillan aquí en España. Dicho esto, y ahora que tenéis material suficiente para elaborar vuestros quintetos del amor, voy con el mío:
PG. Rafer Alston: Un jugador increíble por el cual siento predilección absoluta, probablemente influido por la buenísima temporada 2008/2009 en Orlando. Un jugadores totalmente espectacular. Perdón por la sobrecarga de vídeos pero...





SG. JJ Redick: El único hombre del mundo por el que podría plantearme hacerme homosexual. Pura clase y uno de los tiros más letales y elegante de la liga. Totalmente enamorado de él y pese a que se ha ido de Orlando, rezo para que consiga despuntar de una vez por todas. No soy objetivo en este tema, pero me parece un jugador que podría llegar a ser importante en grandes equipos. Puro amor.
Puro erotismo sobre la cancha
SF. Luke Walton: El gran Luke Walton, con 2 anillos y 9 temporadas en los Lakers. No es ninguna coña, tiene alguna temporada decente y desde luego, es imposible que te caiga mal. Muy puteado por las lesiones, ahora está teniendo minutos en los Cavs y el hombre está haciendo lo que puede. Pero a callar, que tiene dos anillos y Kobe no los habría logrado sin él. JÁ!

PF. Reggie Evans: El mayor representante del juego de las ligas Municipales en el mundo. Rebote, cojones, hostias cuando son necesarias, hostias cuando no lo son tanto, y una barba que es la envidia de todos los jóvenes imberbes. Representa la pasión y el saberse hacer un hueco con pocas condiciones pero teniendo ganas de triunfar. Eterno Reggie. ( Como dato complementario, con su 22-26 de ayer logró su séptimo partido de la temporada con +20 rebotes y su quinto partido con +10 puntos! Increíble).



C. Nikola Pekovic: Otro currante del basket que a base de inteligencia, trabajo y sencillez está consiguiendo ascender hasta la élite actual dentro de los Centers de la NBA(Lo cuál no es complicado, cierto). Personalmente, le veo un potencial tremendo y además está creciendo en un equipo que no puede caer mal a nadie. Por último, una fotito de ese tatuaje que personalmente me parece alucinante, un guerrero que le da el toque perfecto de expresidiario, pese a que no puede ser más buenazo. Dedicado a un zurdo sin coleta.




Bonus: Adam Morrison, que es el abanderado de este gran blog que es ATZ. Love him.

Bueno, y para terminar y en cuanto a entrenadores, no hay ninguno por el que sienta un gran amor, pero si tuviera que elegir uno para dirigir mi equipo sin duda sería Greg Popovich, que es un clásico pero creo que ha demostrado de largo ser el mejor entrenador en activo.
Y hasta aquí este ejercicio de fanboyismo, espero vuestros quintetos!

miércoles, 27 de marzo de 2013

Hate o "me cago en tu puta madre que asco me das"


Odiar. Una cosa muy fuerte y muy fea. En catequesis te dicen que esta mal... pero también te dicen que hay que llegar virgen al matrimonio. Con lo cual si te pasas por el forro lo segundo y la cosa esta muy bien, la lógica nos dice que lo primero tampoco puede ser tan malo. Todos tenemos filias a fobias, no ya en baloncesto sino en todo las facetas de la vida, cosas que te pueden gustar o disgustar pero que en ciertas personas cosas y/o situaciones se alinean de manera que te producen una sensacion irracional que solo se puede clasificar como Hate.

Las cosas vistas a través del prisma del hate se perciben de distinta manera; situaciones, actuaciones, gestos... todo se reinterpreta al gusto del "odiador" para enfocarlo de manera que su psique asimile que todo lo que proviene de su objeto de odio es reprobable. Pero vamos a lo que vamos, que esto es un blog de basket y me voy por las ramas. Todo lo que comento del tema de la reinterpretación, que lleva en el ámbito deportivo a restar méritos, desprestigiar éxitos y despreciar prácticamente cualquier cosa lograda por el jugador/equipo que se nos atraganta. Esto se puede ver claramente ejemplificado en ese punto donde la mayoría de redactores de Aroundthezone nos encontramos, un ecosistema donde abunda la una fauna que daría para estudios antropológicos muy muy profundos: el foro de Marca.  ¿Quien no recuerda con cariño al mítico Air Sergy y las garrafas de bilis que ha vertido sobre Kobe?. Como ese podemos encontrar ejemplos con prácticamente cualquier jugador estelar; actualmente el que parte el bacalao en cuanto a haters es Lebron James, camino de su Cuarto MVP, del récord de victorias consecutivas y de su Segundo Anillo... pero el objetivo de este articulo, ademas de que cada uno confiese sus fobias, es traeros las mías.

Como ya sabéis los que habéis leído aquí yo no soy mucho de "seguir" a jugadores estelares, no me gustaba especialmente Jordan y no me gustan los kobeslebronesduranes, independientemente de que reconozca su tremenda calidad y/o dominio. No, yo soy mas de jugadores tróspidos, infravalorados o cuasi-desconocidos; me gustan mas los malditos que los héroes. Y, como no podía ser de otra manera, los jugadores a los que odio tampoco son estrellas. Algunos son currantes, otros especialistas, AllStars , retirados, en activo... da igual, no podrán escapar a mi valiente furia anónima, algo que tanto abunda en el mundo digital actual.
Así que, sin mas preámbulos, os dejo con el quinteto jugadores que no trago; un starting five que pondría en fila y fusilaría sin que me temblase el pulso ni un ápice:

PG. Greg Anthony. Ser base suplente en NBA es un oficio muy respetable, una raza de jugadores que merecería su propio articulo y donde ha habido gente con mas o menos talento, mas o menos entrega, mas o menos disciplina... pero en esa categoría, el sempiterno point-guard suplente, es donde encontramos al primer miembro de este "Quinteto del Oprobio". Anthony, que ganó la NCAA en UNLV ha tenido una carrera bastante seria con sus momentos estelares como la primera temporada que paso en los recién nacidos Grizzlies donde logro sus mejores marcas personales. Pero no esta aquí por eso, si no por su papel como suplente de Damon Stoudamire en los Blazers... y si, la culpa de que el equipo no jugase a nada y el fuese quién llevaba el timón en detrimento del talentoso Mighty Mouse no es exclusivamente suya, también habría que mirar al banquillo, algo que ya haré luego. Anthony me ponía de los putos nervios, encefalograma plano en ataque, un base funcionarial de esos que hacen que entrenadores como Xavi Pascual tengan que aumentar la provisión de kleneex.

Ojo a la cara de galán... manda huevos.
SG. David Wesley. buff, a este si que no le trago... no dejo de acordarme de los trajes que le hacia Iverson, al que tenía que defender en sus duelos en P.O. cuando jugaba en los Hornets. Y que estopa le daba al pobre AI. Una carrera tan larga como anodina en la que lo mas que se puede reseñar, aparte de despertar en mi un odio irracional, es que fue parte importante de la muerte en accidente de trafico de Bobby Phils, al que estaba echando una carrera en el momento del trágico suceso.
Menos mal que siempre me quedará este épico fallo para regodearme:


SF. Damian Wilkins. Bueno bueno, que este sigue en activo y, lo que tiene delito, titular en los Sixers. Sobrino de e hijo de, hasta ahí sus méritos para jugar en NBA... un matado en las dos universidades en que jugó, un matado en NBA pero, lo que no nos sorprende a nadie, del gusto de algunos entrenadores que le prefieren a gente que aporta mas en ambos los lados de la cancha. cosas de la vida. Leñero, falto de talento y con el mínimo físico exigible para alguien que es familia directa de uno de los jugadores mas espectaculares que pisaron una cancha de basket. Creí que ya me había librado de verle en la NBA, pero no; hasta que no salga de Philly tienen lo que se merecen.


PF. Larry "The Grandma" Johnson.
Ahhh.... go fuck yourself, puta Abuela.

C.Erick Dampier. Muchos son los miembros destacados del Club "Se dejaba llevar"... aquí podrían estar la mayoría de ellos, sobre todo Olowakandi, que me ponía malo pero pese a todo no me caía mal. No, todas mis iras estaban centradas en Erika... ya desde su etapa en Indiana, equipo que le eligió en el gran draft de 1996 con el numero 10 tenia pinta de ser un  sinvergüenza. El robo que orquesto en Dallas fue sencillamente impresionante . Al final se retiró con casi 100 millones ganados por 2/3 temporadas buenas... la ley del mínimo esfuerzo.


Entrenador: Mike Dunleavy. Aqui si me pusiese a explayarme podría dar tranquilamente una lista de 15 nombres... pero pese a los Jeff Van Gundy, Carlesimo y demás, por encima de todos destaca Dunleavy. Intimamente relacionado con el jugador que abre este quinteto por su coincidencia en los Blazers de principio de la década pasada. "El mejor equipo que el dinero puede comprar", como lo llamo Phil, en manos de un inútil. Dunleavy, cuya mejor temporada fue su debut llegando a las Finales con los Lakers post-Magic siempre ha sido de los de defense!, defense!; y poco mas cabe en su ideario baloncestístico. También ha sido experto en sacar partido de lo poco bueno que ha hecho; mención especial a su ultima etapa en Clippers, donde con una buena temporada sobre todo fruto del excelso nivel de Brand, le valió para seguir chupando 4 años mas... incluso medrar hasta el puesto de General Manager. Haciendo buenas migas con el impresentable de Sterling, como no. Ahora esta sin curro, pero este tipo de entrenadores siempre encuentran un hueco, es cuestión de tiempo.

Hasta aquí mi panteón del hate... aguardo ansioso conocer a quien tenéis atragantado vosotros, hypocrites lecteurs.

sábado, 9 de marzo de 2013

El delicado arte de jugar andando.


En unos pocos días, concretamente el 19 de marzo, André Miller va a cumplir 37 años y el poing-guard nativo de California esta de un venerable que no veas. Hablar de Doctor Dre es hacerlo de un jugador que lleva dejando muestras de talento y basket IQ los últimos 10 años... pero curiosamente casi nunca ha disfrutado del reconocimiento, admiración y flashes que se han llevado otros jugadores que esporádicamente han brillado mas pero cuya carrera no ha mantenido la regularidad a la que nos ha acostumbrado Miller. Es lo que tiene no depender en absoluto del físico, que los años pasan poca factura y el cuerpo no sufre tanto. Espero que este repaso a su carrera sirva de reivindicación y homenaje.

Para situar correctamente a Miller y su irrupción en la NBA hay que viajar al estado de Utah donde mediados los noventa nos encontramos con un joven André Miller jugando para los Utes. ¿Un chaval negro de Los Angeles jugando en la Universidad de Utah?; si, desde entonces ya era poco ortodoxo. Paso sus dos primeros años sin destacar en demasía, siendo el escudero de la estrella indiscutible del equipo, Keith Van Horn el Nowitzki mormón; sería con la salida de este rumbo a la NBA cuando Miller demostraría de que pasta estaba hecho.
La temporada 97/98 comienza con el como líder de los Utes, acompañado por dos torres blancas que también pasarían, con mayor o menor fortuna por la NBA, Michael Doleac y el finés Hanno Mottola. Entre los tres meterían a Utah en la Final Four donde en semifinales se enfrentarían a un equipo temible: Arizona, con Bibby y Jason Terry haciendo estragos en el perímetro... pero Miller, de manera fria y pausada, dominó el partido a su antojo firmando el cuarto triple-doble en la Historia de las Final Four: 18 puntos, 14 rebotes y 13 asistencias; y lo mas importante, una victoria apabullante por 76-51.

A la postre perderían el Championship Game contra Kentucky, pero Miller ya habia demostrado que su sitio era la NBA, como se demostró en el draft 1999 donde fue elegido con el Numero 8. La siguiente temporada, ya como senior, fue All-American y dejo la NCAA como All-time leader en robos (254) y segundo de todos los tiempos en asistencias (721) de los Utes; ademas de una licenciatura en sociologia que posteriormente complementaria con un Master.

Su debut NBA fue en el equipo que le había seleccionado, los Cleveland Cavaliers posteriores a la época de Mike Fratello y sus ninjas, que había sido cesado tras su naufragio la temporada anterior. Un equipo poco profundo, con una colección de buenos tiradores, un todavía joven Ilgauskas, machacas como Tyrone Hill y poco mas. Su año de novato fue bastante bueno en lo individual, con promedios de 11 puntos y 6 asistencias que le sirven para entrar en el Primer Quinteto Rookie, números que mejorarían progresivamente cada uno de los tres años que pasó en Ohio hasta llegar a los 16'5 puntos y casi 11 asist. que firmó en la temporada 2001/02, siendo el único jugador de la NBA en alcanzar los dobles dígitos en asistencias en esa temporada.Pero pese a su evolución el equipo no despegaba por lo que los Cavs buscaron su traspaso mandandolo a casa, a Los Angeles... pero a los Clippers.


Recuerdo el trade como si fuese ayer, Miller a cambio de Darius Miles que se veía separado de su compañero de Wild Ears Quentin Richardson. Los Clippers en aquel entonces molaban, pero molaban mucho, incluso mas que ahora: Brand, Maggette, Odom, el ya mencionado Q-Rich, Dooling, Jaric, Olowakandi, Wilkox... una colección de talento, juventud, descaro y swag que hacia que Montes les llamase Al Salir de Clase. Técnicamente Miller era la pieza que faltaba para dirigir ese grupo; pero todo salio mal: lesiones a destiempo, indolencia, entrenadores ineptos... temporada a la basura y Miller hizo las maletas en cuanto pudo.

Su siguiente destino fue Denver, un equipo que llevaba años dando mucha pena pero que parecía podía despegar con la incorporación de un talento sin limite llamado Carmelo Anthony unido a la evolución del brasileño Maybyner Rodney Hilario y las incorporaciones de Marcus Camby y el propio Miller. Tres temporadas y media paso en Denver, 325 partidos con 14p y 7ast y mas importante, tres años de Play Offs.
En 2006 le toco hacer las maletas una vez mas, esta vez con destino Philadelphia y con la papeleta de sustituir a un mito como Allen Iverson... un año de transición y vuelta a sus números y a Play Off.
Acabado su contrato con los Sixers, ya con 33 años, decide buscar un proyecto prometedor donde su experiencia y talento puedan servir a una causa colectiva importante... y ningún sitio mejor que los Blazers, el equipo de Roy, Aldridge y Oden destinado a marcar una época en poco tiempo. Pero ya sabemos como van las cosas en Portland y, si bien tuvo mas suerte que dos de los arriba mencionados, la cosa no le fue demasiado bien. No encaja con Roy, que prefería tener como base un felpudo-humano que le dejase hacer, y tampoco hizo buenas migas con McMillan que siempre fue muy suyo para los directores de juego. Con todo los dos años que jugó en Oregon mantuvo su nivel, jugó Play Offs y dejo algunos destellos de su inteligencia y calidad ademas de firmar uno de los partidos mas épicos que recuerdo contra los Mavs, anotando 52 puntos solo con un triple y 7 tiros libres:


En verano de 2011 toca volver a hacer las maletas, de vuelta a Denver, donde el publico le quiere, siempre ha estado a gusto y hace magnificas migas con George Karl. Un Sexto Hombre de lujo (ha sido el suplente que mas asistencias ha repartido los dos últimos años, con una diferencia tremenda sobre el segundo), un mentor ideal para Ty Lawson y un entrenador asistente vestido de corto... por lo cual finalizado su contrato, el verano pasado, no es de extrañar que haya firmado una renovación con la que estará en Denver hasta los 39 años (salvo traspaso) o hasta que el cuerpo aguante, lo que en su caso puede ser mucho.

Hablar de Miller es hablar de un tipo que nunca ha sido AllStar y que nunca ha pasado una 1º Ronda de Play-Off, ambas cosas son mas atribuibles a la mala fortuna que a su bagaje pues sus mejores temporadas siempre han coincidido con equipos en proceso de reconstrucción o asentamiento de los que ha salido traspasado cuando la cosa mejoraba. Eso unido al escaso reconocimiento que ha tenido por parte del aficionado medio ha provocado que no se le valore como debe... estamos hablando de un tipo que es Top 10 histórico de asistencias y que, como le pasó a Rod Strickland, no ha disputado un Partido de las Estrellas; aunque tampoco hay que extrañarse viendo que Marc Jackson solo lo fue una vez.
Para cerrar os dejo un dato escalofriante, Miller lleva 13 temporadas en la NBA y solo se ha perdido tres partidos por lesión ante lo cual es imposible que no surja la pregunta: ¿hasta que edad tendremos al Doctor Dre dando clases en la NBA?.



jueves, 7 de marzo de 2013

Cristal de Bohemia



Mucho se comenta (y lamenta) sobre el pobre nivel que Dwight Howard está dando en su primera temporada en los Lakers, ya sea por problemas físicos o psicológicos la realidad es que Howard está teniendo su peor temporada en años… Su nivel de actividad y concentración es mediocre como mucho. No obstante, incluso a un 60-70% Dwight te aporta 15-12-2,5 (Puntos, rebotes y tapones) mas una presencia defensiva importante (si, pese su bajón en ese sentido aun es un jugador influyente en defensa, los Lakers permiten casi 3 puntos menos per-48 con él en pista). Así que es el momento de pensar a cambio de quien llego Dwight a Los Ángeles…. sí, todos nos acordamos de Andy Bynum, un chico con el potencial de ser el mejor “center” de su generación, que acabo en Philadelphia SIxers y que ¡¡¡¡AUN NO HA DEBUTADO!!!!

Ya desde la primera temporada en la que jugó una gran carga  de minutos, Bynum, mostro signos de tener unas rodillas frágiles, la peor pesadilla de un hombre alto. Un “breve” resumen de las lesiones que ha sufrido: En 2008 sufre un dislocamiento de su rotula izquierda que requiere pasar por quirófano, en 2009 un desgarro del MCL, durante los PO de 2010 otro desgarro, esta vez de menisco, requirió otro paso por quirófano; 2011, un pequeño edema óseo en la rodilla derecha, le hizo perderse algunos partidos. Durante 2012, la temporada del “Lockout” Bynum pudo disputar su primera temporada libre de lesiones (aparentemente), pero ya en verano se descubrió durante un tratamiento de Orthokine (el famoso tratamiento para la artritis al que se sometió Kobe), cierto daño en su rodilla derecha, poco antes de ser traspasado a Philadelphia 76ers. Su carrera como Sixer empieza con cierto dolor en dicha rodilla, ante el cual, los Sixers, deciden ser conservadores y darle todo el tiempo necesario para recuperarse. En este momento las cosas se empiezan a poner más raras que su que su estilismo capilar, a las pocas semanas sufre una misteriosa lesión en su rodilla izquierda, la “sana”, mientras jugaba a los bolos. Días después, en Noviembre,  el GM de los Sixers anunciaba que las rodillas de Andy habían sufrido un importante empeoramiento desde el traspaso y que sería baja indefinida, aunque apuntaba que podría volver tras el All-Star. A finales de Febrero la evidencia saltaba tras una nueva recaída tras su primer entrenamiento 5 vs 5, las rodillas de Bynum estaban muy degeneradas, requiriendo posiblemente una nueva cirugía artróscopica en su rodilla derecha…. ¿He mencionado que este verano es agente libre?
Viendo casos similares (Brandon Roy y Greg Oden) no parece que el futuro de Bynum resida en una cancha de la NBA. En el mejor de los casos podrá estabilizar esa degeneración, pero ¿Cuáles serán las limitaciones de una liga tan exigente a nivel como la NBA? Dadas sus muestras de falta madurez psicológica y de concentración en el baloncesto (se ha insinuado que realmente no le gusta ser jugador profesional de baloncesto) esta pregunta es incluso más dolorosa. 

Y ahora llega su primer verano como agente libre no restringido, en realidad el no debería preocuparse demasiado, parece que pese a las evidencias hay varios equipos dispuestos a hacerse con sus servicios. De hecho, los grandes perdedores de esta situación sin duda son los Sixers, han dado mucho talento joven y su jugador franquicia a cambio de Bynum, y ahora se encuentran en mitad de una crisis deportiva, sin que Bynum haya jugado ni un solo partido y con la posibilidad de que se vaya a cambio de nada este verano. O peor, firmarle un gran contrato y que acabe retirándose como Brandon Roy por imperativo medico. Sea como sea es más que probable que, sin importar el contrato que firme tendrá algún tipo de clausula para que el equipo pueda atenuar nuevos posibles problemas con sus rodillas, ya sea en forma de “Team Options” o de objetivos de partidos jugados.




Quien se arriesgara por el joven Bynum es imposible de saber, lo que está claro es que pese a la “Dwightmare” los Lakers se han salvado por poco de que esta temporada fuera más dramática (si cabe).